El objetivo de la Dirección General de Tráfico es llegar a 2020 sin un fallecido en nuestras carreteras, así nos lo confirma cada vez que puede y puede cada vez que quiere, nuestro ilustrísimo Director Generalísimo de Tráfico y visto lo visto va a poder.
Que conste que a mi particularmente, que lucho por la seguridad vial de verdad, sin tapujos, a pie de calle, en los colegios, en las empresas, en mis clases y en donde me dejan, siendo crítico con quien miente, con quien esgrime la seguridad vial para quedar bien políticamente, me parece un objetivo súper loable ¡Qué ojala se cumpliera, para bien de todos!
Pero por favor no nos traten como a niños, como a gente sin criterio, como a ignorantes, sin capacidad de analizar. ¿Hasta donde puede llegar la prepotencia?
Ha llegado a mis ojitos, estos, que cada vez se impresionan con menos cosas, un artículo publicado en elantirradar.com por Pedro Javaloyes que no tiene desperdicio, de verdad que no, en él se señala una desviación estadística de 365 muertos menos en esas santas y escrupulosas cifras de descenso de víctimas que continuamente nos hace llegar nuestro Director Generalísimo de Tráfico.
Os transcribo literalmente el dialogo mantenido por el periodista con el responsable de la DGT , que pregunta ¿Como puede haber una diferencia tan notoria en un determinado período, entre las cifras de la DGT y las del Ministerio del Interior?
“La pregunta era sencilla, y aquí la reproduzco, en un nuevo episodio de diálogo besuguil”:
Yo: “¿Cómo es posible que distintos materiales informativos de Interior y la DGT ofrezcan unas cifras de fallecidos determinadas hasta una fecha y a partir de esa fecha dichas cifras sean diferentes?”.
DGT: “Todos los datos de las notas de prensa son oficiales y correctos”.
Yo: “Pero a ver, ¿cómo van a ser correctos datos diferentes sobre la misma cuestión, cómo van a ser igualmente correctas dos series históricas de fallecidos en la que una tiene 365 muertos más que la otra?
DGT. “Todos los datos de las notas de prensa son oficiales y correctos”.
Yo: “Sí, ya me lo has dicho, pero no me has contestado”.
DGT: “Podemos estar horas discutiendo, yo sólo puedo decir esto”.
Yo: “Me queda claro, gracias”.
Así que, según la DGT , 365 muertos es una desviación estadística aceptable que convierte en verdadera tanto a aquella serie que los incluye como aquella que, de un plumazo, los ha dejado fuera.
En el mes de diciembre 2010 asistíamos a otro curioso hecho: desde julio los índices de mortalidad habían sido superiores al mismo periodo en 2009, por lo que Tráfico dejó de publicar los datos correspondientes a los meses de septiembre, octubre y noviembre.
Jugando con las cifras es sencillo llegar a las metas que se marcan en la Dirección Generalísima de Tráfico.
Así, llegar a 2020 sin fallecidos será fácil, con publicar lo que mejor convenga bastará.
Mientras, nuestro Director Generalísimo de Tráfico decía que es “posible” que se cumpla uno de sus sueños en materia de seguridad vial: que ninguna persona fallezca en las autopistas españolas en 2020. "Sueño con un horizonte: que en 2020 no haya ningún muerto por accidente de tráfico en ninguna autopista española. Creo que es posible. Hay que ser valiente para hacerlo”, comentó en su intervención en la Tribuna RACC.
¿Es esta es la verdadera cara de la DGT ? Me pregunto.
¿Valiente? No sé si es el termino exacto, ¿Os recuerda algo está forma de proceder? Soy un mar de dudas y sigo preguntándome, ¿Hay que ser valiente para convertir estadísticas de fallecidos en pura propaganda? ¿Al servicio de que o de quien? ¿Podéis vosotros contestarme?